El pasado viernes 3 de mayo se realizó la investidura y juramento del alcalde suplente de la Municipalidad de Rancagua, Emerson Avendaño Llanca, quien asumió así sus funciones como máxima autoridad comunal.
El acto que se llevó a cabo en la Sala de Sesiones de la Municipalidad de Rancagua, donde estuvieron presentes el secretario municipal, Carlos Morales; las y los concejales María del Carmen Orueta, Carlos Arellano, Viviana Morales, Manuel Villagra, Hugo Guzmán, Jacqueline Vidal y Cristian Toledo; la directiva de ASEMUCH Rancagua, además de directivos, funcionarias y funcionario de la Municipalidad.
En la instancia, el secretario municipal Carlos Morales leyó el decreto exento que señala que Emerson Avendaño asume sus funciones a contar de ese día, a quien también le prestó juramento como alcalde suplente de Rancagua.
En la oportunidad, el alcalde suplente Emerson Avendaño hizo un llamado a “trabajar en conjunto por dar estabilidad al municipio y, por lo tanto, a la sociedad. En mí, van a encontrar un aliado para que podamos juntos poder surcar estos mares que son bastante turbulentos (…) las puertas van a estar abiertas para trabajar en unión y en comunión por Rancagua”.
Ayer lunes, ocupando su nueva oficina desde temprano en la mañana, el ahora alcalde suplente en propiedad Emerson Avendaño comenzó a asumir los desafíos que debe enfrentar con un municipio y una Corporación Municipal en crisis.
En conversación con El Tipógrafo repasó los suelos que lo llevaron a buscar ser concejal luego del estallido social y sus primeras tareas en Rancagua, como establecer el real alcance del déficit de la CORMUN, así como revisar su estructura administrativa, y finalmente, devolverle la confianza a la ciudadanía en sus autoridades.
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