Gendarmería presentó dos querellas en contra de dos internos de la cárcel de Rancagua. Los hechos ocurrieron el día 28 de septiembre. El primero de ellos afectó al Jefe de Régimen Interno, quien fue atacado con un arma cortopunzante por un interno que posteriormente fue trasladado hasta una unidad de la región Metropolitana.
En tanto, el segundo ataque lo recibió un gendarme miembro del grupo de apoyo a la reacción primaria (GARP), quien fuera atacado mientras trasladaba a un interno dentro del establecimiento penal.
El director regional de Gendarmería, coronel Alejandro Fuentes Morales, destacó que “ la presente querella busca cautelar los derechos de nuestros funcionarios y funcionarias quienes en el legítimo ejercicio de sus funciones cumplen con su deber. Esperamos que junto a las acciones del Ministerio Público, podamos lograr sanciones ejemplares para quienes pretenden infringir el orden interno de los penales y evitar de esta forma la sensación de impunidad en aquellos internos más violentos y refractarios”
Por su parte, el abogado de la dirección regional de Gendarmería, Jaime Oda Campla, destacó que estas querellas van en apoyo de la protección de los funcionarios, ya que cada vez que se amenaza o se agrede a un gendarme se está cometiendo un delito, conforme a lo tipificado en la Ley Orgánica de Gendarmería de Chile, y estos hechos deben ser denunciados y sancionados como tal.
Oda añadió que más del 90% de las querellas interpuestas por Gendarmería son acogidas y terminan en una sanción en contra de los internos.
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