Ex gendarme es condenado a 5 años por homicidio simple: Familia criticó sentencia de Tribunal

“Un veredicto totalmente absurdo”. Así calificó Laura Arriola la condena que el Tribunal de Juicio Oral de Rancagua dio al ex gendarme que en enero del 2017 dio muerte a su hermano, en un balneario de la comuna de Coínco. El imputado, en medio de la investigación, quedó en libertad tras pagar una fianza, luego de permanecer cuatro meses en prisión preventiva.

“Lo condenaron a 5 años por homicidio simple, con libertad vigilada. Como familia estamos mal, es horrible, un veredicto totalmente absurdo. Los peritos indicaron que él (la víctima) recibió 9 estocadas, como va a ser un homicidio simple con todas esas heridas si hasta le desfiguró el rostro”, indicó la hermana de la víctima.

Según los antecedentes, era el 29 de enero del 2017 cuando esta familia se encontraba compartiendo en el balneario Las Vertientes de Chillegüe, en la comuna de Coínco, cuando se percataron que el imputado empezó a hacer gestos obscenos delante de unas niñas, situación que quiso frenar Gabriel Arriola, increpándolo.

Producto de esto, se llegó a una discusión que terminó con el hombre herido de dos puñaladas, en el tórax y abdomen. Producto de sus heridas fue trasladado al servicio de Urgencia del Hospital Regional de Rancagua, sin embargo, producto de la gravedad de las lesiones, murió dos horas después de la agresión.

Tras el ataque, el ex gendarme fue detenido y formalizado, quedando con la medida cautelar de prisión preventiva por ser considerado un peligro para la sociedad. Sin embargo, cuatro meses después quedó en libertad tras pagar una fianza de $3.500.000, ya que el Tribunal recalificó su situación a peligro de fuga, lo que le permitió optar al beneficio.

Tras esta resolución del tribunal, la familia de la víctima está estudiando la posibilidad de apelar. Al respecto, la hermana de la víctima indicó que “vamos a apelar a esta decisión, hemos hablado con los abogados y este viernes iniciaremos los trámites para ver este proceso”.

A esto, agregó que como familia ha sido un proceso “duro” y que la condena entregada por los jueces no eran la que esperaban. “Es algo que no se lo doy a nadie, es una burla. Lo que queremos es justicia, pese a que pida perdón, no le creemos y creo que en ningún momento se ha arrepentido de quitarle la vida a mi hermano”.