Continúan las repercusiones luego que el seremi de Agricultura, Joaquín Arriagada solicitara al Ministerio Público una investigación tras descubrir una presunta irregularidad en una resolución que permitía el cambio de uso de suelo de un terreno en Santa Cruz.
Los hechos se remontan al pasado abril, cuando una persona llegó hasta las dependencias de la secretaría ministerial para solicitar una modificación en una resolución de cambio de uso de suelo para 24 lotes de 1.000 metros cuadrados -documento que habría permitido que el terreno pasara de ser agrícola a ser apto para construcción de viviendas- en el sector Chomedahue de la comuna de Santa Cruz.
Luego de recopilar los antecedentes que desencadenaron en la aprobación de la resolución, se detectó que no existían respaldos del documento y que no se llevaron adelante los procedimientos para declarar el cambio de uso de suelo. De esta manera, notaron que la aprobación de la resolución -que data del 2017 y se encontraba firmada y timbrada las autoridades de la época- habría sido conseguida por el particular de manera irregular.
Ante la situación, el seremi de Agricultura de la época -cuya firma figuraba en el informe-, José Guajardo, aseveró que “obviamente esto me genera bastante preocupación y estoy muy interesado en que se aclare completamente. Y saber si es el único caso o hay más casos similares”.
Guajardo recalcó que “la información que yo tengo es la que me ha proporcionado el seremi actual de Agricultura”, no obstante, aseguró que “es una preocupación latente, porque que haya un caso así hace pensar”.
A raíz de los hechos, el ex seremi tomó medidas y adelantó que “le entregué esa información a mi abogado y estamos viendo hacernos parte de la denuncia, porque soy uno de los que se ve más afectado y por eso quiero que eso se esclarezca de la mejor forma posible”.
Respecto al cómo se podría haber llevado adelante la presunta falsificación del documento, el ex titular regional de Agricultura recalcó que “no me gustaría especular”. No obstante, señaló que “de acuerdo a la información que recibí de la Seremía, el documento tiene tantos errores que no cuadran, que solo me hace pensar que fue hecho por personas que quisieron pasar sobre el sistema con una serie de falsificaciones”.
“Según revisé, el formato es uno que no corresponde, que no se usaba en ese momento; el número de resolución está absolutamente desfasado (…); también hay un error en el fechero, moscas mal puestas, timbres que no corresponde, entonces, son muchos elementos que hacen presumir que son personas que trataron de lograr su objetivo con elementos que no corresponden”.
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