“Nunca había escuchado algo así”, dijo el jefe de policía de Iowa, Roger Porter, al medio estadounidense The Messenger, mientras relataba el llamado recibido por parte de un hombre, de 51 años, que accidentalmente hace pocos instantes había recibió el disparo de su perro.
El inusual hecho ocurrió en el estado de Iowa, en el norte de Estados Unidos, cuando el arma que portaba en su cintura se puso en funcionamiento mientras jugaban ambos jugaban.
Según detalló The Messenger, Richard Remme trataba de adiestrar a su perro Balew -un cruce entre pitbull y labrador- para que se lanzará sobre él estando recostado en su sillón. En ese juego de forma poco clara la pistola 9mm que llevaba terminó con los dos dispositivos de seguridad y se disparó.
“Aparentemente él (perro) desactivó el seguro una vez” y después “uno de sus dedos entró en el gatillo”, contó Remme al diario The Messenger. El hombre afortunadamente no tuvo mayores consecuencias y fue dado de alta rápidamente.
“Solo en Estados Unidos puedes ser disparado por tu perro”, dijo Shannon Watts, fundadora de ‘Moms Demand Action for Gun Sense in America’, movimiento que pretende controlar las las armas en el país luego de una serie de tiroteos en escuelas durante los últimos tiempos.
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