La semana pasada un grupo «anti-especista» ingresó a un laboratorio de la Universidad de Chile en el campus Juan Gómez Millas y liberó a decenas de degús, que son roedores endémicos de Chile, dejando el siguiente mensaje: «Hoy nos alzamos y actuamos para romper con las jaulas de la ciencia y el progreso. Solidarizamos con las ratas que se encontraban encarceladas. Rechazamos las excusas utilizadas para justificar la autoridad de delantal blanco».
Paradójicamente, el «acto de liberación» tuvo como consecuencia que la mayoría de los roedores endémicos de Chile, que murieran de frío y por ataques de perros.
El grupo de desconocidos volvió a atacar, esta vez vandalizaron los laboratorios de arqueología, donde no se trabaja con ratas ni animales, sino con fósiles.
Para agregar señalaron en su mensajes que la razón de su ataque es «visibilizar que en Facso se tortura a las ratas para un beneficio antropocéntrico y especista».
«No más tesis ni investigaciones. No permitiremos que sigan sacando sus carreras condicionando, electrocutando y enjaulando seres libres», enfatizaron, haciendo alusión a las críticas que recibió la liberación de roedores por la cual algunos estudiantes perdieron el trabajo de sus tesis.