Una cuestionable decisión tomó una pareja de Hooks, Texas en Estados Unidos, quienes echaron de su casa a un menor de 7 años y le dijeron que nunca regresara porque está «poseído por el demonio», según informaron los medios locales.
Ronald Wright, de 56 años, y Rendy Wright, de 39 y madre del niño, declararon a las autoridades que tras hablar con un predicador que les aseguró que el pequeño está poseído decidieron expulsarlo de su casa.
El hecho ocurrido el pasado 26 de agosto está siendo investigado por las autoridades fronterizas quienes presentaron cargos contra la pareja por abandono infantil.
Un vecino de los Wrigth declaró a la policía que el menor fue hasta su casa después que lo expulsaran y agregó que pasó la mayor parte del día jugando con su hijo, hasta la hora de la cena cuando le dijo que debía regresar a su casa, el menor se fue y regresó a los minutos asegurando que su mamá no lo dejaba entrar.
El sujeto acompañó al pequeño hasta la casa de sus padres, donde los Wrigth le dijeron al menor, «que se fuera y nunca volviera a esa casa». En ese momento, el vecino llamó a la Policía, que rápidamente cuestionó a la pareja.
Ahí el matrimonio declaró que el niño se portaba muy mal y que un predicador les dijo que estaba
«poseído por el demonio», por lo que decidieron deshacerse de él y prohibirle la vuelta al domicilio familiar. Tras su declaración, la policía les preguntó si estaban bajo el efecto de la metanfetamina, algo que ambos negaron, aunque reconocieron el uso habitual de esta droga.
Los Wright fueron detenidos bajo fianza de 35.000 dólares cada uno y enfrentan cargos por abandono infantil, lo que tiene una pena de entre dos y diez años de cárcel.
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