Este martes la Confederación Nacional de la Salud Municipal (Confusam) convocó a un paro a nivel nacional para exigir a las autoridades aumentar las medidas de seguridad dentro de los centros de salud y así poder disminuir los hechos de violencia vividos tanto por funcionarios como pacientes.
En Rancagua, por ejemplo, cerca de 150 funcionarios provenientes de diversos Cesfam de la región se sumaron a una marcha por las calles de la capital regional. El presidente regional de la Confusam, Marcos Vargas, sostuvo que la paralización tuvo una adhesión del 80%.
“Este paro fue convocado con la finalidad de hacer presión», asegura Marcos Vargas, quien calificó la movilización como «de advertencia», ya que «la ministra de salud (Carmen Castillo) prometió que haría gestiones para que haya carabineros en todos los servicios de urgencia, sin embargo esto nunca ocurrió”.
En O’Higgins, solo el Hospital Regional de Rancagua cuenta con un carabinero, mientras que en los Cesfam hay solo un guardia de seguridad. Medida considerada como insuficiente por Vargas ya que “con poner un guardia que vista de civil en el consultorio no se soluciona nada porque no tienen los implementos y muchas veces no cuentan con la formación necesaria”.
Recordemos que el punto más álgido del conflicto ocurrió luego que en el mes pasado un sujeto que ingresó como paciente al consultorio N°1 de Baquedano, en Rancagua, atacara a una funcionaria con una tijera, además de propinar golpes a otros funcionarios y pacientes.
Según expresó el presidente de la Confusam, existe una proliferación de casos de menor violencia como robos, asaltos y riñas en los centros de salud de la región: “Tenemos miedo porque a veces no sabemos si del turno, cuando es tarde y está oscuro, vamos a salir vivos o no. Necesitamos más carabineros en los centros de salud”, señaló Vargas.
El martes, a pesar del paro, sí hubo atención en los distintos establecimientos de atención primaria, la que por la falta de personal fue más lenta de lo habitual. “Los consultorios no quedaron abandonados», enfatizó el representante regional de la Confusam.
Llamado de atención a autoridades
Si bien a principios de este mes se conformó una mesa de trabajo compuesta por la Intendencia, Carabineros y la Confusam, a la fecha, el representante regional de los trabajadores de la salud acusa que no ha sido contactado por las autoridades para concretar acciones que permitan aumentar efectivamente la seguridad en los centros de salud.
“A nosotros nos usan para sacar adelante promesas que no cumplen y para tomarse la foto antes de la campaña, pero no nos apoyan cuando están en el cargo”, por lo cual, “aquí necesitamos un compromiso moral de parte de los alcaldes y de parte de la ministra de Salud que diga que no van a tolerar que nos sigan insultando, escupiendo, maltratando o incluso amenazando de muerte”, enfatizó el dirigente regional.
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