«Las entrevistas que no debimos publicar», ese fue el titular con el que el diario La Tercera, reconoció este miércoles que su corresponsal, Ximena Marín Lezaeta inventó conversaciones «exclusivas» con los ex presidentes Álvaro Uribe de Colombia y ex jefe de Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero.
Fue una supuesta entrevista exclusiva con este ex mandatario hace sólo dos días la que produjo se destapara la farsa. En ella el político socialista «se explayaba en su misión como mediador en el conflicto» de Venezuela y «su contenido fue replicado por agencias internacionales». Sin embargo, La Tercera, reconoció que «la entrevista publicada nunca se realizó»; fue «inexistente».
José Miguel Vidal, el jefe de gabinete de Rodríguez Zapatero, informó la falsedad de la entrevista, por lo que el diario contactó el mismo lunes por la noche a Ximena Marín. El diario consignó que la periodista «aseguró que la entrevista se había realizado», pero cuando se le exigieron «los audios como respaldo (…) prometió buscarlos», sin que, hasta ahora, los haya presentado.
Una revisión posterior que realizó el matutino estableció que el texto correspondía a «una réplica casi exacta de una entrevista concedida por Rodríguez Zapatero a la revista española Cambio 16, publicada en mayo». En tanto, el español emitió una declaración donde desmintió tajantemente a Marín: «Esa entrevista no se ha producido, ni presencialmente ni por ningún otro medio».
La Tercera decidió tras este hecho revisar los trabajos enviados con anterioridad por su corresponsal, estableciendo que, «se detectó que otra entrevista, al ex Presidente colombiano Álvaro Uribe, publicada el 26 de junio, también coincidía con un reporte anterior de Cambio 16. El editor de ese semanario, Iñigo Aduriz, relató que Marín visitó ayer el medio para intentar explicar lo inexplicable».
El diario nacional añadió que, «revisada la decena de trabajos publicados (…) bajo el nombre de Ximena Marín Lezaeta, detectó diversas irregularidades en el correcto ejercicio de la profesión».
Ximena Marín, «quien se presenta como licenciada en comunicaciones de la Universidad Complutense»-, detalla La Tercera, cometió las siguientes acciones:»Seleccionó intervenciones públicas de dirigentes políticos españoles y las convirtió en entrevistas; recogió citas de ruedas de prensa y las presentó como conversaciones exclusivas; utilizó entrevistas radiales sin citarlas e incluso construyó supuestas entrevistas con declaraciones de terceras personas».
Para finalizar La Tercera, ofreció sus disculpas a sus lectores y a quienes se vieron afectados: «La Tercera ofrece disculpas públicas a nuestros lectores por no haber detectado a tiempo una mala práctica que daña el trabajo de decenas de profesionales que integran este diario. También nos disculpamos con las personas a las que atribuimos entrevistas que nunca fueron realizadas y a los medios que, como Cambio 16, fueron afectados por el mal uso que Marín hizo de su material periodístico»,
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