“Se acabaron los plazos para materializar la elección del gobernador regional”. Así de tajante es el ex presidente de la comisión Asesora Presidencial para la Descentralización, Esteban Valenzuela. El experto advierte que si bien aún queda plazo para que finalmente la nueva autoridad sea electa en noviembre, “hay poco optimismo”.
Valenzuela explicó que la elección del gobernador regional “está supeditada a concluir el proyecto de ley de traspaso de competencias -que se encuentra hace alrededor de seis meses en el Senado- y eso es lo que tiene paralizado”.
Sin embargo, quien presidió la comisión especializada para la creación del proyecto asegura que “esto lo advertimos”. Acusó “corrupción programática, negativa, pirinola, distorsión. Pero hay responsabilidad de los partidos y mucho de los senadores y, en menor medida, del gobierno”.
Por esta razón el también ex alcalde de Rancagua llamó a que “la presidenta ponga suma urgencia para que al menos -aunque pierdan- la ciudadanía pueda discernir quiénes son los que mienten”.
Paralelamente al proyecto de traspaso de competencias, el Congreso debe aprobar un tercer proyecto, el que incluye el mecanismo de la elección y las inhabilidades. No obstante, la iniciativa aún no es despachada desde La Moneda a Valparaíso.
En ese sentido, Valenzuela recalcó que se ha aprovechado este tema para dilatar la discusión, ya que “algunos senadores, algunos diputados, incluso algunos intendentes en ejercicio o ministros, se dice, tendrían interés. No solo de la centro-izquierda, sino que también de la derecha”.
En la misma línea, agregó que “habría, por una parte, una mezcla rara, un tratamiento donde no se ponen de acuerdo en las inhabilidades y, por otro lado, una pequeña esperanza de que se pueda elegir este año al gobernador regional si es que llegan a un acuerdo político de, por esta vez, bajar las inhabilidades a cuatro o cinco meses antes de la elección y de esa manera poder celebrar la elección este año”.
“Lo concreto es que, para los plazos serios de aprobar la ley, en marzo el gobierno debiera poner suma urgencia al proyecto, pero se lavan las manos con que no pueden”, detalló.
“Soy sincero, hay muy poco optimismo”, asegura Valenzuela, pero insiste en que “hay una remota esperanza en que la presidenta se ponga las pilas y le ponga suma urgencia y en que aceptemos un proyecto menos draconiano de inhabilidades que permita que muchos de los actores políticos, obviamente renunciando a sus cargos, puedan hacerlo para que esto se destrabe de una vez”.
Según el ex presidente de la comisión Asesora Presidencial todo esto deberá resolverse “antes del 15 de abril”.
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