Encuestas y demandas: ¿poca sintonía con los chilenos?

Aunque muchos digan que no comentan las encuestas –y pueden estar en su derecho- podría ser un error no tomarlas en cuenta, vendarse los ojos y hacerse los sordos ante los resultados.

Y aunque algunos digan que una encuesta es muchas veces una fotografía del momento, es importante que los analistas pongan atención a la tendencia que ciertos temas reflejan en el tiempo.

Y en ese marco, nadie puede pasar por alto las cifras que reflejan una baja aprobación no sólo de la Presidenta Michelle Bachelet (que cayó a un mínimo histórico del 15%), sino que también de los dos conglomerados políticos que han gobernado el país desde la vuelta de la democracia. La CEP indica que Chile Vamos tiene solo un 10% de aprobación; mientras que en la Nueva Mayoría alcanza el 8%.

Variadas son las razones, pero la encuesta CEP entrega una que parece tener mayor relevancia: la poca sintonía que existe entre actores del mundo político con la ciudadanía. Dato no menor, por ejemplo,  es que un 25 por ciento de los encuestados asegure que por ningún motivo irá a votar en las próximas elecciones, mientras que otro 40% dude entre acudir o no a las urnas. Además, que la ciudadanía, con masivas marchas, haya puesto en el debate público y político el tema de las AFP demuestra que este tema no estaba entre las prioridades del gobierno, que sí ha puesto esfuerzo en materia constitucional a pesar de que solo para el 15% este tema debería ser prioridad para el país.

Otro dato: Según la encuesta CEP, salud y delincuencia siguen siendo un tema fundamental a resolver para los chilenos. Con el 60%, salud debería ser la principal área que debería abordar el próximo presidente; mientras que el 44% cree que la delincuencia es el tema con mayor prioridad dentro de Chile.

Dos áreas que se repiten en el tiempo entre las más relevantes para los chilenos, pero que a la vez demuestra la poca capacidad que ha existido –independiente del gobierno de turno- de darle una solución real a estas problemáticas. Quienes lideran los destinos del país deben saber leer las encuestas y a raíz de un análisis crítico enmendar el rumbo y así satisfacer las reales necesidades de los chilenos.