La construcción del puente Sanchina, realizado por el municipio de Machalí, continúa siendo tema de debate dentro de la comuna. Esta vez fue el alcalde José Miguel Urrutia quien debió responder ante el concejo municipal los cuestionamientos hacia el polémico proyecto. En la oportunidad el edil señaló que este seguirá adelante e incluso adelantó que esta vez Rancagua sí se sumará a la iniciativa.
La instalación de dicho puente tuvo un costo cercano a los 80 millones de pesos provenientes del Fondo Regional de Iniciativa Local (Fril), y se enmarcaba dentro del proyecto que buscaba conectar Sanchina con República de Chile para así transformarse en una opción vial para quienes viajan desde Machalí a la zona norte de Rancagua.
Su cuestionamiento surgió luego que el propio edil señalara a El Tipógrafo que el proyecto total se encontraba estancado, “porque el único que ha hecho algo es Machalí”, en relación a la construcción del puente, dejando entrever que Rancagua no trabajó en el sector que le correspondía por ubicación.
Tras estos dichos, el seremi de Transporte, Francisco Lara, se sumó a la controversia y en relación a la iniciativa machalina expresó que el puente “no va a servir para nada” porque el Gobierno Regional trabaja en un proyecto de solución vial mayor, que involucra más vías de tránsito, situación que no otorgaría dicha infraestructura, lo que implicaría que el gasto cercano a 80 millones fue innecesario.
A pesar de las críticas y reiterados cuestionamientos hacia su iniciativa, José Miguel Urrutia insistió en la continuidad del proyecto e incluso señaló que hubo conversaciones con el alcalde de Rancagua, Eduardo Soto, donde este se comprometió con los profesionales a trabajar con la parte que le corresponde.
En esta línea, expresó que “la última conversación que tuvimos con Eduardo Soto, que fue bastante interesante y positiva, fue que íbamos a trabajar en conjunto y cooperar para poder descongestionar Machalí”.
Agregó que incluso “él (Soto) va a hacer algunas expropiaciones en el sector de San Joaquín al frente del Unimarc para salir a la Villa el Sol, así que eso nos va a ayudar un poquito a paliar la necesidad de poder salir hacia Rancagua. Él va a conseguir poner los profesionales para hacer el tramo que le corresponde”.
José Miguel Urrutia expresó además que “nosotros también tenemos que hacer algunas gestiones con empresas privadas y también con la Seremía de Vivienda para poder justamente buscar alternativas”.
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