El cordobés mostró su valor tapando la más clara de la visita que con rápidas salidas, saltándose la zona de creación, ponía en alerta al bloque de tres defensas que probó ‘Vitamina’, para encontrar mayor solidez.
La otra deuda fue la poca claridad para manejar los balones detenidos con que contó muy cerca del pórtico del argentino Exequiel Cacace.
‘Vitamina’ movió la banca de entrada en el complemento poniendo a Lezcano por el juvenil Hormazábal. Pero como en gran parte de este segundo semestre, los celestes tendrían que venir desde atrás. Santiago Malano aprovechó un enredo en la zaga tras un tiro de esquina para abrir el marcador, cuando el reloj marca 5’ del segundo tiempo.
Con el fantasma de la eliminación de la Copa Chile más presente que nunca, el equipo celeste necesitaba una reacción. Calandria lo tuvo pero Cacace le tapó el ángulo de tiro para enviar al córner, a esa altura la jugada colectiva más peligrosa del partido para los rancagüinos.
Las esperanzas ahora estaban en el estreno de Emilio José Zelaya. El delantero mostró ganas y se asoció mejor de lo que lo hizo un irreconocible Pedro Muñoz. Pero a diez del pitazo final la última puntada seguía siendo el gran karma.
A 7’ del final y buscando con más voluntad que buen juego, aparecería en una posición dudosa Gastón Lezcano para empujar de cabeza a la red un centro desde la derecha de Droguett que fue tocado en su trayectoria.
Sobre el cierre el mismo volante zurdo casi provoca el estallido de El Teniente con un cabezazo picado al suelo que Cacace alcanzó a desviar al córner. Porque, en la última del partido Mauricio Iturra con un trallazo rasante clavó el definitivo 2 a 1, generando una desazón en masa de los casi 4 mil fanáticos que presenciaron la tercera derrota del torneo, la segunda a manos de Rangers.
Con solo un partido por disputar, O’Higgins quedó con 4 puntos, de ganar el domingo en Curicó, está obligado a esperar una serie de resultados que les permitan quedar bajo la ‘U’, que con 10 puntos y 45’ por jugar con un 2 a 0 a favor, de no ocurrir nada extraordinario, terminará como líder.