PUBLICIDAD
Columnas de Opinión

Se busca candidato (a)

MARTES, 25 DE NOVIEMBRE DE 2014
Publicado por

Columna de Opinión



PUBLICIDAD

A pesar del instructivo del ministro de Hacienda, esta semana comienzan nuevamente los despidos de funcionarios a honorario y a contrata en la administración pública y se repetirá el chiste de cada año, profundizado, esta vez, por el ciclo de cambio de gobierno: se irán aquellos que no tienen padrinos en el parlamento (que en su mayoría son los que hacen bien su pega). Sin embargo,  se quedará un grueso número que ingresó con la derecha y que en el transcurso del año se borraron de la UDI o RN, cambiaron de ideología así como uno se cambia ropa interior, o son parte del circo, pero de derecha. Entonces, hablarán  con su padrino quien, a su vez, le recordará al otro legislador (el mismo que tiene deudas  pues tuvo gente suya trabajando en el municipio UDI de Rancagua), los “favores concedidos” en el periodo pasado, o alguna ilustre profesional se acordará de que su abuelo, fue diputado socialista, cosa que, por supuesto, olvidó cuando la derecha gobernaba. Se quedarán, además, aquellos que entraron con el barco pirata este año que merecimientos, para ser despedidos por incompetentes, tiene de sobra pues, como ya lo preveíamos, solo se han dedicado a hacer chambonadas como solicitarle a las nuevas contratadas que “se den una vuelta” para apreciar en toda su magnitud su talento físico; cuando no, a contratar diplomados truchos, en institutos truchos, o a entregarle contratos para estudios a empresas de amigas que, por supuesto son, además,  parte de una conocida red y, como ocurre siempre, sin ninguna experticia en el contrato adjudicado, “pega” que, como se sabe, indirectamente terminarán haciendo los mismos funcionarios. El conocido broker, a su vez, les ha exigido a las autoridades de verdad, que no son los seremis, en cada Mall (perdón servicios),  las nóminas con la gente que se debe ir y, por supuesto, la larga lista a contratar pues, hay una elección ad portas, y no se pueden perder votos, menos por una promesa de trabajo que, por supuesto pagará Moya.

Y los funcionarios de carrera continuarán observando perplejos, el espectáculo de incompetencia, malversación de fondos que ocurre con cada cambio de administración y que, lamentablemente (y lo digo con mucha sinceridad y pena), con nuestros amigos se ha salido de control pues, en lo que yo conozco, tengo la sensación que “el choreo es a destajo”.

En este oscuro panorama a veces sueño con la aparición de un candidato  cuya mayor promesa sea  convocar a una asamblea constituyente que rompa el equilibrio con el parlamento y se emprendan las transformaciones que nos urgen, así como restituir la moral pública, favorecer  trabajar con aquellos que habiendo votado o no por él (ella), no solo hagan bien su trabajo, sino que estén en posesión de un alto estándar respecto del uso y distribución de los recursos públicos; o que beneficien a gente joven, preparada moral e intelectualmente, y no a aquellos que comenzando por llevar el maletín y lustrar los zapatos del susodicho, terminan aprendiendo lo peor de sus prácticas. Tampoco es iluso lo que digo: el modelito así como va, no resiste otro periodo: o habrá un reventón, o dejaremos de pagar impuestos. Y lo decimos en serio. Somos por naturaleza tontos, pero nos estamos cansando de ser estúpidos.


PUBLICIDAD
Comentarios

Cargando...
PUBLICIDAD
Loading...