El año pasado los agricultores de la Región se vieron afectados por las heladas de septiembre.
A un mes de la llegada de la primavera, los pronósticos de la Dirección Meteorológica de Chile anuncian lluvias para septiembre. Precipitaciones que estarían dentro del rango normal, pero que de todas formas generan preocupación en el sector frutícola, especialmente porque durante el año pasado sufrieron con las heladas que se sintieron en la zona centro-sur tras las lluvias que cayeron en medio de las celebraciones de Fiestas Patrias.
Según explica la encargada de la oficina de Agrometeorología regional, Pamela García, “la Dirección Meteorológica de Chile pronostica lluvia para el trimestre agosto, septiembre y octubre, y se prevén que las precipitaciones acumuladas se presenten en torno a los valores normales, es decir, que no debieran ser mayores a lo que regularmente se producen durante el período, por lo que no debiera ser una primavera complicada”.
La preocupación pasa porque de ser “intensas durante un período determinado, producen caídas de hojas, daños en la flor, provocando también un aumento en la probabilidad de que se presenten plagas y enfermedades”.
En ese sentido, la especialista agregó que “cuando comienza a llover en primavera hay temperaturas más altas, por ende hay humedad, y cuando se combinan estas dos condiciones, la probabilidad de aparición de enfermedades fungosas en mucho más alta, por lo tanto, tienes que aplicar mayor cantidad de productos químicos, gastando más platas en productos, en los costos de aplicación”.
Pese a que estos son pronósticos, “eso no quita que puedan ocurrir lluvias que puedan producir daños, pero dentro de lo que los modelos dicen, estaríamos más cercanos a una condición de primavera normal”, agregó Pamela García.
De igual forma, aclara que “como son pronósticos, quiere decir es que la probabilidad de ocurrencia de un determinado fenómeno no es a ciencia cierta que esto va a suceder así, se basan en modelos matemáticos que simulan situaciones, por lo tanto, de acuerdo al comportamiento, de las temperaturas, del mar y de la situación del Niño o la Niña o la etapa neutra, hay una tendencia a lo que pudiera suceder”.
Respecto a la situación que se está viviendo ahora, explicó que “cuando nosotros estamos en una condición de neutra a Niño y ahora pasamos a neutro -una situación bien extraña – las heladas que se producen son más bien locales, no son como las del año pasado que fueron como una ola de onda polar, que produjo daños en muchas comunas con una amplia cobertura”.
“Lo más probable es que se produzcan heladas durante la primavera, por las condiciones de cielos despejados y de que se fuga el calor que se acumuló durante el día en el suelo, pero con los pronósticos que tenemos que hablan de una situación relativamente normal es de esperar que no vengan situaciones tan importantes como hubo el año pasado», explicó Pamela García.
Presidente Frusexta: “Dijeron que agosto iba a ser muy lluvioso y hasta ahora no ha pasado nada”
Felipe García-Huidobro, presidente de Frusexta, expresa su preocupación por la situación que se pueda dar en las próximas semanas. “Las lluvias a destiempo siempre causan daños, va a depender de la especie frutal de que se trate. Por ejemplo, la uva de mesa es complicada porque en general es más frágil que otras especies frutales y esto va a depender de cuándo caiga la lluvia”.
Asimismo, agrega que “lo que también es asociado a las lluvias son las heladas, y también está en riesgo que después del agua y dependiendo de su intensidad, puedan caer heladas, lo que también puede dañar el fruto, especialmente los carozos»
«Cuando hay una helada y está el fruto recién cuajado, la fruta se expande y las paredes no resisten y se mueren”, explica.
Respecto a los pronósticos que se dieron para este invierno, Felipe García-Huidobro señaló que “dijeron que agosto iba a ser muy lluvioso y hasta ahora no ha pasado nada. Anunciaron que las lluvias vendrían un poco tarde, entre agosto y septiembre, pero hasta ahora vamos bastante mal. Se necesita que caiga nieve en la cordillera porque esas son nuestras reservas para el verano”.
Sobre el período que más preocupación genera, indicó que “para los frutos que están recién desarrollándose, es septiembre un mes bastante clave, también octubre, por lo que si tenemos heladas en esos meses nos podemos complicar mucho”.
Por último, reiteró que “en general las lluvias, cualquiera sea el tipo y a destiempo, puede generar bastante problema con la condición de la fruta porque se deteriora. Por ejemplo, la cereza, al absorber más agua el suelo o al mojarse el mismo fruto, generando la partidura de la piel al no resistir el aumento del volumen”.
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