Los elementos incautados son utilizados aparentemente en las riñas que se realizan al interior de los módulos.
72 funcionarios de la cárcel de Rancagua participaron en el allanamiento que logró retirar de los módulos diversas especies ilegales que los internos mantenían en sus celdas.
En la diligencia se pudo incautar un número elevado de armas hechizas como “estoques”, además de celulares, chips, droga y más de 14 litros de bebida alcohólica artesanal que los internos mantenían escondida en distintos lugares de la unidad.
“Hemos realizado un registro de dos agrupaciones de módulos donde hemos podido incautar una gran cantidad de elementos ilegales, los mismos que son utilizados en las riñas que se realizan al interior de los módulos”, indicó el director regional de Gendarmería, Coronel Federico Muñoz.
Este procedimiento corresponde a una iniciativa de seguridad que se realizó en todas las regiones del país. La idea de este tipo de operativos es sacar de circulación todos los elementos que alteren el funcionamiento y la tranquilidad de las distintas unidades penales del país.
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