La gastroenteritis es la condición clínica que tiende a aumentar significativamente durante la época estival. Es por esta razón que la doctora del Cesfam Machalí, Daniella Truffello, realizó una serie de orientaciones preventivas para evitar sufrir esta enfermedad.
En términos técnicos, la gastroenteritis es una inflamación de la membrana interna del intestino causada por un virus, una bacteria o parásitos. Los síntomas incluyen diarrea, dolor abdominal, vómitos, dolor de cabeza, fiebre y escalofríos. La mayoría de las personas se recupera sin tratamiento.
Para la doctora Daniella Truffello, el origen de la gastroenteritis en época de calor “se debe por el contacto más cercano con el medio ambiente o el camping, asimismo por el consumo de alimentos frescos, y la relación con aguas no potables y animales”.
La profesional también se refirió a las causas de la enfermedad, indicando que “su principal origen es la trasmisión del malestar, el cual puede ocurrir mediante el consumo de alimentos inadecuadamente preparados o de agua contaminada, igualmente a través del contacto físico con personas infectadas».
Los principales factores de riesgo son el contacto con personas enfermas, malos hábitos de higiene, y el consumo de aguas no procesadas.
Truffello también expresó que la principal consecuencia negativa de la gastroenteritis para el organismo “es la deshidratación”, que además “es el gran desafío en un cuadro de diarrea aguda”.
“Una hidratación adecuada, es decir, reponer correctamente la pérdida de líquido, especialmente con la administración de sales rehidratantes, favorece el pronóstico y evita posibles complicaciones. La deshidratación es más común en bebés, niños pequeños, ancianos y personas con un sistema inmunológico débil”, expresó la especialista.